Sentir el espíritu de un caballero templario
Miravet
La visita al Castillo será la culminación de una ascensión divertida, de unos 20 minutos, durante la cual podemos alimentar la imaginación de nuestros hijos con alguna leyenda e historia propia de caballeros, para que se vayan haciendo a la idea de la maravilla que se encontrarán cuando lleguen dentro del recinto.
Una vez arriba, las vistas sobre el Ebro son impresionantes, y la selfie, fotografía o vídeo, imprescindibles.
Se pueden visitar las murallas y diferentes estancias como caballerizas, cisterna, cocina, refectorio, almacenes o el importante iglesia románica.
Antes de subir al castillo, le recomendamos que os perdáis por el casco antiguo del pueblo. Encontraréis casas que trepan por la montaña y que cuelgan sobre el río. Calles porticadas, rincones encantadores y unas vistas extraordinarias sobre el Ebro que nos dejarán boquiabiertos.
También verá casas abandonadas y placas sobre las casas que recuerdan las dos grandes riadas que ha sufrido la población: la más antigua, que data de 1787, y otra de 1907.
Servicios
Información práctica
Horarios
Precios