Un capricho de la naturaleza junto al Gaià
Querol
Después de un descenso pronunciado (que no haremos en la vuelta) cruzamos por primera vez el Gaià por un puente de madera, en medio de un paisaje de una belleza mayúscula, extraído de un cuento de hadas y de duendes. Nosotros nos hemos detenido para escuchar cómo bajaba el río, y los pájaros que habitan el espacio.
Para volver, sólo hay que seguir el camino que hay justo cuando se cruza el río. Durante la vuelta encontramos un área de pícnic.
Recordamos que aparcar es un poco complicado.
La ruta
Verificada
Ruta verificadaBaja
Dificultad5,0 Km's
Distancia2 horas
Tiempo aprox.Si
Ruta circular