Una escapada para conocer hadas en un lugar mágico y acabaréis en un antiguo balneario
Porqueres
Una vez pasada esta zona de lagunas saldremos un rato del recorrido circular para llegar hasta las Estunes, un bonito espacio natural mágico.
Si hay un rincón mágico en el Pla del Estany este es el paraje de las Estunes, en Porqueres. De entrada se trata de un espacio natural sorprendente, con grietas, grutas y cuevas por las que podréis pasear tranquilamente. A su alrededor, una frondosa vegetación, sobre todo encinas y robles, dan al lugar verdor y mucha sombra, por lo que si estás en verano estaréis frescos. Además, al lado del aparcamiento hay habilitada una zona de pícnic.
Y, sobre todo, es mágico y misterioso porque dicen que las grietas y las cuevas son las entradas a los palacios de las hadas, unas hadas que habitan este lugar desde tiempos inmemoriales. Se esconden de la gente, se pasan el día tejiendo las redes finas e impenetrables que cuelgan en la entrada de las cuevas y sólo salen de noche para ir a cantar y bailar al Lago de Banyoles. Una vez visitado el paraje comprobaréis que no es extraño que lo eligieran para vivir, tan silencioso y bucólico. Es el lugar ideal para sentir el canto de los pájaros e incluso el de las hadas.
Entre las cuevas y las grietas que se forman en el travertino, la piedra típica de la zona, tal vez, parando atención, alguna Goja, las hadas que según la leyenda vivían entre este lugar y el estaño. Este espacio, fresco, tranquilo y con zona de picnic, es ideal para descansar un rato antes de volver a la zona de las lagunas para reanudar la vuelta circular, ahora con pasarelas de madera y miradores entre los estanques que encontraremos, los de en Montalt, el Petit y el Gros, y el de la Cendra, de curiosos colores oscuros. La última parada de la ruta es el balneario de la Puda, que funcionó entre mediados del siglo XIX y mediados del siglo XX. Aunque es un monumento protegido, hoy en día se encuentra en estado ruinoso junto a la fuente que le da nombre.