El Castillo de Torroella de Montgrí

Si habéis pasado por el Baix Empordà seguro que os habréis fijado en la silueta de un castillo sobre una montaña. Es inconfundible y se divisa desde buena parte de la comarca, imponente y solitario.

Es el Castillo de Montgrí , que os proponemos que visitéis ya que vale mucho la pena. Sin embargo, hay que pensar que no se puede ir en coche y que la única manera de acceder es a pie. Sin embargo, la excursión es asumible para gente de cualquier edad, también los pequeños. Eso, sí, que estén acostumbrados a caminar.

La excursión comienza al pie de la montaña, en Torroella, en una zona habilitada con aparcamiento para coches, aseo y zona de picnic. A partir de ahí, no tiene pérdida, ya que el camino está bien indicado.

La subida, durante la cual encontraréis tres pequeñas capillas, es constante, pero tiene premio final. Y es que el castillo, de cerca, es tan espectacular como parece mirado desde la distancia.

La planta cuadrada, las murallas altísimas y las cuatro torres cilíndricas en el vértice, lo hacen especialmente estético. Veréis, sin embargo, que el interior está vacío.

La explicación es que su construcción no llegó a finalizarse. nunca Empezó en 1294, con el objetivo de servir de punto de control ante los ataques del conde Ponç d'Empúries, y se interrumpió en 1301, al entrar en declive el condado de Empúries y la amenaza que representaba.