Un paseo por la Vilella Baixa, la Nueva York del Priorat. Descubrimos un skyline singular y contemplamos la comarca del vino desde un lugar privilegiado
Así, pues, si hacemos una escapada con niños hasta la Vilella Baixa, pasearemos y contemplaremos un pueblo encantador, y que a pesar de ser pequeño, algunas de las casas tienen alturas de hasta 8 plantas! Correremos por las calles empinadas y estrechas y nos haremos una selfie encima del puente medieval que cruza el río Montsant.
Para comer, iremos al área de picnic del mismo pueblo, y por la tarde, disfrutaremos de vistas excepcionales de la comarca desde el 'Balcó del Priorat', un mirador de ensueño en el pueblo vecino de La Figuera.